Reseña.. POR QUÉ FRACASAN LOS PAÍSES.
Título completo: Por qué fracasan los países: Los orígenes del poder, la prosperidad y la pobreza.
Autores: Daron Acemoglu y James A. Robinson. Ambos son profesores de economía y han sido galardonados, junto con Simon Johnson, con el Premio Nobel de Economía (año 2024) “por sus estudios sobre cómo las instituciones se forman y afectan la prosperidad”.
Año de publicación: 2012
Editorial Deusto -9788423412662
Nos encontramos ante un libro que desarrolla una teoría, que puede considerarse económica, política y social en al que se llega a la conclusión de que la prosperidad depende, fundamentamente, de las instituciones políticas y económicas de un país. Para demostrar su teoría los autores se basan situaciones históricas en todo el mundo. Aunque, en mi opinión, a la Revolución Gloriosa de Inglaterra se le da gran importancia. Si a este hecho los autores no lo consideran el origen de lo que denominan Instituciones inclusivas, si lo consideran el inicio de un proceso.
A lo largo del libro van desarrollando unos conceptos que hay que tener en cuenta:
Instituciones Inclusivas. Son las que hacen respetar los derechos de propiedad crean igualdad de oportunidades y fomentan la inversión en habilidades y nuevas tecnologías. Pueden ser Económicas y Políticas.
Instituciones Extractivas. Son aquellas estructuradas para extraer recursos de la mayoría para un grupo reducido y que no protegen los derechos de propiedad ni proporcionan incentivos para la actividad económica. También pueden ser Económicas y Políticas.
Las Instituciones económicas son aquellas que dan forma a las medidas económicas considerando como tales los incentivos para recibir una educación, ahorrar e invertir, innovar y adoptar nuevas tecnologías.
Las Instituciones políticas son las que determinan como funciona el proceso que establece bajo que instituciones económicas se vivirá.
Se establece un círculo virtuoso entre las instituciones políticas inclusivas y las instituciones económicas inclusivas, estableciendo un sistema de control que hace que la interactuación entre unas y otras las hagan mejorar. No obstante los círculos no son absolutos. Por lo que siempre habrá dudas entre las relaciones entre una instituciones extractivas y unas instituciones inclusivas en el mismo país. Según los autores una instituciones políticas extractivas siempre acabarán limitando la prosperidad.
A su vez establece, por contra, un círculo vicioso entre las instituciones políticas extractivas y las instituciones económicas extractivas, cuya interacción aumenta el poder extractivo de las instituciones. Este círculo vicioso puede llegar al punto de convertirse en la Ley de hierro de la oligarquía, sustituir un grupo de instituciones extractivas por otras todavía más perjudiciales. Todo ello trae como corolario que un país con instituciones políticas extractivas tiende a la inestabilidad.
También se recurre al concepto de coyunturas críticas, que son grandes acontecimientos que perturban el equilibrio político y económico existente en una o muchas sociedades. Los autores ponen como ejemplo la Peste Negra, el descubrimiento de América (que denominan como “apertura de rutas del comercio atlántico”) o la Revolución Industrial. Lo que trae a colación el concepto “destrucción creativa”, es el fenómeno que impone la adopción de ciertos métodos y tecnologías, al imponerse la imprenta, los escribientes tuvieron que adaptarse a otros trabajos, el maquinismo hizo que muchos obreros temiesen por su puesto de trabajo, y la robotización hace que los mismos temores se repitan hoy.
Comienza la teoría afirmando que no hay factores geográficos o raciales que influyan sobre la prosperidad y que ésta depende fundamentalmente de las instituciones de un país, también pone en duda la intervención exterior que se haga sobre ese país, toda vez que son sus instituciones las que tienen que adaptarse al asesoramiento y canalizar la ayuda. De ello la necesidad de cierto grado de centralización que señalan los autores
Resulta interesante lo que los autores llaman las pequeñas diferencias y su influencia en el devenir futuro de los países, Para ello se recurre a múltiples ejemplos de como dos pueblos uno al lado de otro y sometidos a las mismas circunstancias, con un mismo origen, al paso del tiempo han llegado a una situación diferencia con grandes diferencias de bienestar y prosperidad. Es muy llamativo el ejemplo de Nogales, una ciudad con frontera entre Sonora(México) y Arizona (Estados Unidos).
Establecen también la importancia que tienen sobre las i9nstituciones los medios de comunicación llegando por fin a establecer lo que define una partitocracia, como resumió un comentarista chino:”Para conservar el liderazgo del Partido en la reforma política, se deben seguir tres principios: El Partido debe controlar las Fuerzas Armadas; el Partido debe controlar a los dirigentes; y el Partido debe controlar las noticias”
Sin lugar a dudas el libro será del gusto de los que disfruten con la economía, la política y la historia. También abre la posibilidad de ser una base de estudio de la propia sociedad en cuanto a las instituciones que tiene, sobre todo hasta qué punto son extractivas o inclusivas y la tendencia que tiene el sistema de instituciones que hay en España, en nuestro caso. Pero eso es otra historia, que ya contaremos.
Les dejo con unos extractos del libro:
Los países mejoran cuando ponen en marcha instituciones políticas adecuadas que favorecen el crecimiento, pero que fracasan (a menudo, estrepitosamente) cuando dichas instituciones se anquilosan o no logran adaptarse a los tiempos cambiantes. En todo momento y lugar, las personas poderosas siempre procuran hacerse con el control total del gobierno, menoscabando el progreso social en favor de su propia codicia.
Crear monopolios bancarios y dar préstamos a los políticos es un buen negocio para los políticos, si nadie se lo impide. Sin embargo, no es especialmente bueno para los ciudadanos.
Cada sociedad funciona con una serie de reglas políticas y económicas creadas e impuestas por el Estado y Ciudadanos colectivamente. Las instituciones económicas dan forma a los incentivos económicos: los incentivos para recibir una educación, ahorrar e invertir, innovar y adoptar nuevas tecnologías. Etcétera. Es el proceso político lo que determina bajo qué instituciones económicas se vivirá y son las instituciones políticas las que determinan cómo funciona este proceso.
Una persona de negocios que teme que su producción sea robada, expropiada o absorbida totalmente por los impuestos tendrá pocos incentivos para trabajar y muchos menos incentivos para llevar a cabo inversiones e innovaciones.
El bajo nivel educativo de los países pobres se debe a las instituciones económicas que no logran crear incentivos para que los padres eduquen a sus hijos, y a las instituciones políticas que no inducen al gobierno a construir, financiar y dar apoyo a las escuelas y a los deseos de los padres y sus hijos.
Referencia a la Carta del Pueblo de 1838: Circunscripciones iguales, que aseguren la misma cantidad de representación para el mismo número de electores, en lugar de permitir que las circunscripciones pequeñas hundan los votos de las grandes.Parlamentos anuales, con lo que se presenta el control más eficaz contra el soborno y la intimidación, ya que, aunque se pueda comprar una circunscripción una vez cada siete años (incluso con voto secreto), ninguna cartera podría comprar una circunscripción (con un sistema de sufragio universal( cada doce meses, y los miembros, al ser elegidos solamente para un año, no serían capaces de desobedecer y traicionar a sus electores, como ahora.
Por supuesto, este riesgo no debía volverse a correr. Roosevelt continuaba: El jueves pasado, describí la forma de gobierno estadounidense como un equipo de tres caballos proporcionados por la Constitución al pueblo estadounidense para que puedan arar su campo. Evidentemente, los tres caballos son las tres ramas del gobierno: el Congreso, el ejecutivo y los tribunales. Dos de los caballos, el Congreso y el ejecutivo, tiran al unísono, pero el tercero, no.
Primer punto de la revolución cultural: Aunque la burguesía haya sido derrocada, todavía intenta utilizar las viejas ideas, cultura, costumbres y hábitos de las clases explotadoras para corromper a las masas, captar su mente y orquestar su regreso. El proletariado debe hacer justo lo contrario: debe enfrentarse a todos los retos de la burguesía en el terreno ideológico y utilizar las nuevas ideas, cultura, costumbres y hábitos del proletariado para cambiar las mentalidad del conjunto de la sociedad. Actualmente, nuestro objetivo es luchar contra las personas que ostentan la autoridad y derrotarlas, puesto que toman el camino del capitalismo. Debemos criticar y repudiar a las autoridades académicas burguesas reaccionarias y la ideología de la burguesía y todo el resto de las clases explotadoras y transformar la educación, la literatura, y el arte y todos los demás elementos de la superestructura que no se corresponden con la base económica socialista, para facilitar la consolidación y el desarrollo del sistema socialista.
Las instituciones económicas inclusivas que hacen respetar los derechos de propiedad crean igualdad de oportunidades y fomentan la inversión en habilidades y nuevas tecnologías. Éstas conducen más al crecimiento económico que las instituciones económicas extractivas, estructuradas para extraer recursos de la mayoría para un grupo reducido y que no protegen los derechos de propiedad ni proporcionan incentivos para la actividad económica. Las instituciones económicas inclusivas, a su vez, respaldan y reciben el apoyo de instituciones políticas inclusivas, es decir, las que reparten el poder político ampliamente de manera pluralista y son capaces de lograr cierto grado de centralización política para establecer la ley y el orden, la base de unos derechos de propiedad seguros y una economía de mercado inclusiva. Asimismo, las instituciones económicas extracticas están relacionadas sinérgicamente con las instituciones políticas extractivas, que concentran el poder en manos de unos pocos, que entonces tendrán incentivos para mantener y desarrollar instituciones económicas extractivas en beneficio propio y utilizar los recursos que obtengan para consolidar su control del poder político.
Como las élites que dominan las instituciones extractivas temen la destrucción creativa, se resistirán a ella y cualquier crecimiento que germine bajo instituciones extractivas, en última instancia, durará pòco tiempo. La segunda razón es que la capacidad de los que dominan las instituciones extractivas de beneficiarse enormemente a costa del resto de la sociedad implica que el poder político bajo instituciones extractivas sea muy codiciado, lo que hace que los grupos y los individuos luchen para obtenerlo. En consecuencia, habrá fuerzas potentes que impulsarán a las sociedades bajo instituciones extractivas hacia la inestabilidad política.
Las sinergias entre instituciones políticas y económicas extractivas crean un circulo vicioso en el que las instituciones extractivas, una vez en marcha, tienden a persistir. Asimismo, existe un círculo virtuoso asociado con las instituciones políticas y económicas inclusivas. Sin embargo ni el círculo vicioso ni el virtuoso son absolutos.
Las coyunturas críticas son grandes acontecimientos que perturban el equilibrio político y económico existente en una o muchas sociedades. Como la peste negra, que mató posiblemente a la mitas de la población de la mayor parte de Europa durante el siglo XIV; la apertura de rutas del comercio atlántico, que creó enormes oportunidades de negocio para muchos en Europa occidental, y la revolución industrial, que ofreció la posibilidad de que se produjeran cambios rápidos pero también perturbadores en la esctructura de las economías del mundo.
La hipótesis de la ignorancia aporta fácilmente una sugerencia sobre como “solucionar” el problema de la pobreza: si la ignorancia nos ha conducido aquí, la ilustración y la información de los líderes y los diseñadores de políticas nos pueden sacar de esta situación y deberíamos ser capaces de “diseñar” prosperidad en el mundo proporcionando el asesoramiento adecuado y convenciendo a los políticos de lo que es buena economía.
La hipótesis de la ignorancia todavía es la que predomina en los círculos de formación de políticas occidentales, que, casi excluyendo todo lo demás, se centran en cómo diseñar prosperidad.
Estos intentos de diseño son de dos tipos. El primero, a menudo defendido por organizaciones internacionales como el Fondo Monetario Internacional, reconoce que el desarrollo insuficiente está causado por malas instituciones económicas, y entonces propone una lista de mejoras que intentan estas organizaciones internacionales para inducir que estos países pobres las adopten.
Los intentos de las instituciones internacionales de diseñar el crecimiento económico intimidando verbalmente a los países pobres para que adopten políticas e instituciones mejores no tienen éxito porque no se producen en el contexto de una explicación de por qué las instituciones y políticas malas están ahí ya para empezar, excepto la de que los líderes de los países pobres son ignorantes. La consecuencia es que las políticas no se adoptan ni se implantan, o se implantan solamente de nombre.
El segundo enfoque. Afirma que existen muchos “fallos del micromercado” que se pueden corregir con un buen asesoramiento y que la prosperidad se logrará si los diseñadores de políticas aprovechan estas oportunidades que, de nuevo, se pueden lograr con la ayuda y la visión de economistas y otras personas. Según este enfoque los pequeños fallos del mercado están en todas las partes de los países pobres. Por ejemplo, en su sistema educativo, en la atención sanitaria y en la organización de sus mercados.
Lo que ocurrió en el valle central de Afganistán no es un incidente aislado. Muchos estudios estiman que solamente entre el 10 o, como máximo, el 20 por ciento de la ayuda alguna vez llega a su objetivo. Existen docenas de investigaciones por fraude a oficiales locales y de la ONU por desviar dinero de las ayudas. Sin embargo, la mayor parte del dinero desperdiciado que resulta de la ayuda exterior no es fraude, sino solamente incompetencia o, incluso peor, algo habitual para las organizaciones de ayuda.
Ley de hierro de la oligarquía, sustituir un grupo de instituciones extractivas por otras todavía más perjudiciales.
Existe otro actor, o conjunto de actores, que puede tener un papel transformador en el proceso de cesión de poderes: los medios de comunicación.
También los medios de comunicación, sobre todo las formas nuevas, basadas en avances en la tecnología de la información y la comunicación, como blogs, chats anónimos, Facebook y Twitter, fueron cruciales para la oposición inrnní contra las elecciones fraudulentas de Ahmadinejad de 2009 y la represión posterior, y parecen tener un papel crucial similar en las protestas de la Primavera Árabe que continúan mientras este manuscrito llega a su fin.
Tal y como resumió un comentarista chino:”Para conservar el liderazgo del Partido en la reforma política, se deben seguir tres principios: El Partido debe controlar las Fuerzas Armadas; el Partido debe controlar a los dirigentes; y el Partido debe controlar las noticias”