06 febrero 2025

METER EL DEDO EN LA LLAGA

 Meter el dedo en la llaga.

Eldiario.es/https://www.eldiario.es/politica/sanchez-comunica-netanyahu-mensaje-israelies-no-quieren-escuchar_129_10712159.html

El paso del tiempo pone las cosas en su sitio y tarde o temprano nos obliga a enfrentarnos con lo que dijimos. En general practicamos poco el refrán que dice “soy esclavo de mis palabras y dueño de mis silencios”, pero en el mundo político se pierden las oportunidades de quedarse callado. Máxime cuando nuestras declaraciones se hacen en un momento difícil para un aludido. Y hay naciones que te la guardan, saben esperar y tienen buena memoria.

Y eso le pasó, por ejemplo, a Gadaffi. Pensó que Estados Unidos y, sobre todo el Reino Unido, habían olvidado (como habían hecho otras naciones) su mecenazgo a terroristas en el pasado. Y esta fue la causa de que Occidente interviniese en apoyo a los disidentes libios durante la Primavera Árabe y le dejara caer, aunque dijese que combatía al yihadismo y fuese verdad. Fue abandonado y linchado por una multitud. Donde las dan las toman debió pensar alguno.

Hoy los medios publican las declaraciones del ministro de defensa Israelí, Israel Yazt, insinuando que los países que reconocieron al Estado Palestino deberían acoger a los gazatíes que están dispuestos a expulsar de la franja para luego cederla a los Estados Unidos. Así nos lo cuenta Larazón.es en un artículo que escribe Alberto Tejedor y que titula “El ministro de Defensa israelí insta a España a acoger gazatíes: "Veremos su hipocresía si se niegan”, también nos lo cuenta ElDebate.com en un artículo de Andrea Polidura y que titula “Israel reprocha al Gobierno de España su «hipocresía» y pide que acoja a los palestinos de Gaza”; tomando la noticia de la agencia EFE Público.es nos cuenta que “Israel propone a España como destino para la deportación de gazatíes y Albares responde:”Nadie nos tiene que decir lo que tenemos que hacer”. No incluyo los titulares de El mundo y de El País porque sus artículos son para suscriptores. La intención de evacuar a los palestinos de Gaza se refleja en los siguientes titulares: “Israel prepara un plan para la ‘salida voluntaria’ de los palestinos de Gaza tras la propuesta de Trump”, en Público.es (agencia EFE); “Israel ordena a su ejército un plan para sacar a los gazatíes voluntariamente por tierra, mar y aire a otro país”, Larazón.es (Alberto Tejedor). Me temo que en las páginas de opinión el tema no pasará desapercibido y mañana tendremos la oportunidad de leer y escuchar múltiples puntos de vista.

Pero no quiero perder la ocasión de recordar que los dirigentes israelíes dijeron algo parecido a lo que ha respondido Albares (“Nadie nos tiene que decir lo que tenemos que hacer”), y si nosotros los hemos acusado de genocidas ahora nos acusan de hipócritas. Alguien habló por mí ayer y hoy me toca compartir el reproche. Moralmente es una acusación grave que políticamente pueda quedar, en España, en agua de borrajas. Igual de grave fue la acusación de que Israel no respetaba el derecho humanitario y hoy podemos comprobar que  no quedó en el olvido. Israel nos pide ser consecuentes con lo que dijimos, y ante el absurdo que era reconocer un estado sin territorio ahora se encuentran en la tesitura de acoger a los que, ahora sí, van a ser refugiados (y pueden ser dos millones y medio de personas). Israel ha transferido el problema palestino, no muy amablemente, a España, Noruega, Irlanda y Canadá. No es una bravata, Trump apoya estas medidas.

Es pronto para determinar las consecuencias, pero en un momento en que consideramos un problema el fenómeno inmigratorio que ha supuesto la entrada ilegal de 63.970 personas en España nos plantean la acogida de dos millones y medio. Eso es meter el dedo en la llaga. Como siempre, los grandes esfuerzos lo tendrán que realizar los que no hacen grandes declaraciones y los que no se manifiestan en las calles. Serán los ciudadanos y los padres de los manifestantes los que tengan que abrir las puertas de sus casas. La grandilocuencia debe apoyarse en lo que estemos dispuestos a hacer más que en lo que estemos dispuestos a imponer. No me gusta lo que ha hecho Israel, el sentimiento de que luchaban por su supervivencia no es justificación. Pero el que habla en nombre de los israelíes le ha dicho al que habló en nombre de los españoles algo parecido a “donde las dan las toman”.

Y respecto a nuestros dirigentes, es hora que se planteen si realmente representan a la mayoría de los españoles o si no son más que el producto de una España irresponsable.

4 comentarios:

Trecce dijo...

De demagogia van sobrados.

LUFERURA dijo...

Lo malo es el que lo sufre y paga.
Un saludo

Susana Moreno dijo...

La nación sin estado es Israel. Los gazatíes llevaban allí generaciones. El problema lo trajeron los judíos. Un beso

LUFERURA dijo...

No entro ahí, antes estaban los cananeos y también los echaron. No creo que la solución ahora sea que se vaya uno u otro, sino que convivan.
Un saludo.