18 diciembre 2025

EL CUENTO DEL REMORDIMIENTO

 


Nos convoca este jueves nuestra amiga Campirela y nos propone un viajar con los sentidos, que un olor, sabor, canción o sonido nos despierte un recuerdo que nos lleve a un sentimiento. No me siento muy alegre así que he decidido que se despierte un viaje al pasado y una sensación incómoda... o más de una

 El cuento del remordimiento.

Realizaba Don Pedro su paseo matutino. Disfrutaba de hacerlo en soledad con sus soliloquios sobre cualquier tema. Se topó con una riña entre un niño mayor, casi joven, y uno menor, no más que un crío.. Se saldo la discusión con un sopapo del mayor al pequeño. Éste visiblemente disgustado con lágrimas en los ojos pero sin romper a llorar sólo dijo

  — ¡Malo!

 Era lo único que podía hacer por defenderse en aquella discusión desigual. El grito era a la vez una queja, un reproche, una acusación y una admisión de impotencia. La única salida que le quedaba al más débil de los dos.

 Sintió Don Pedro una quemazón en su interior, le indignó tal abuso aunque no sabía el motivo de la discusión. Recordó su infancia. Había tenido muchas discusiones cuando era pequeño. Había sido una buena pieza. Había recibido y dado muchos sopapos en los recreos y a la salida del colegio. Su sentido del pundonor le había llevado a ello, creyéndose siempre cargado de razón. Eran recuerdos generales, no podía recordar los momentos exactos. La quemazón ya era un remordimiento que le taladraba el alma. Su mente había retrocedido muchos años y volvió a su casa sin ganas de soliloquios, atenazado  por la tristeza que sin saber porqué le había provocado esa situación.

 Pasó Don Pedro el resto del día triste y en silencio, dándole vueltas a la causa de ese remordimiento. Rebuscaba en su pasado con el sentimiento añadido de haber hecho algo tan grave que lo había tenido que desterrar de su memoria. Ese “malo” resonaba en su mente como un aviso.Llegó la noche y le costó dormir.

 No supo si fue un sueño. Se encontró en una bronca siendo niño, casi adolescente, con otro chico más pequeño que le había dado un patada a su balón cuando el casi iba a marcar un gol. Su reacción fue darle un sopapo e irse de nuevo a jugar, no prestó más atención. Pero ahora recordaba que el niño que le fastidió el tanto le llamó “malo” de una forma muy parecida.

 Al remordimiento se unió el arrepentimiento, le gustaría pedir perdón a ese niño.... pero pasados cincuenta años era demasiado tarde.

Adrien Jans Van Ostade. Pelea de niños 1634. Museo de Bellas Artes Houston.

 Más viajes en el mismo enlace.

24 comentarios:

Matías dijo...

Cosas que nos marcan durante el día se pueden convertir en un mal sueño por la noche.
Un saludo.

Campirela_ dijo...

Gracias, por tu aporte, y mira lo que ese acontecimiento le llevo a la memoria de Don Pedro.
Una sola palabra lo que nos puede dejar en el subconsciente.
Creo que Don Pedro, solo con el gesto de acordarse y arrepentirse, ya ha sido perdonado.
Un abrazo, y muy feliz casi fin de semana.

chica dijo...

Dom Pedro num exame de consciência, voltou ao passado e reviu a cena. Após 50 anos, não pode pedir perdão pessoalmente, porém sentindo bem profundamente no coração, arrependio de verdade, já foi perdoado!
Adorei! abraços, tudo de bom, chica

Susana Moreno dijo...

Es muy habitual que los mayores abusen de los pequeños. Un beso

Dafne Sinedie dijo...

Un "¡MALO!" gritado por un niño enfadado es más afilado que un cuchillo, la verdad. Eso sí, cincuenta años es mucho tiempo para disculparse...
Besos jueveros, Luferura

Buscador dijo...

Hay cosas que pasan en la vida donde vuelve a nacer nuestro recuerdo de una manera que se hace casi presente y, nos pesa en la conciencia...

Feliz Navidad
Un saludo de Buscador

Nuria de Espinosa dijo...

Hola Luferera. Me ha parecido profundo porque muestra cómo un hecho pequeño y cotidiano puede despertar culpas intensas del pasado. Impacta especialmente la palabra “malo”, tan simple y a la vez tan poderosa, capaz de perseguir a Don Pedro durante toda su vida. Creo que el relato refleja bien cómo, con el paso del tiempo, comprendemos el daño que pudimos causar sin ser conscientes entonces, y deja una sensación triste al mostrar que no siempre es posible reparar los errores, solo aprender de ellos.
Un abrazo

Gustab dijo...

Las culpas siempre obedecen al reflejarse en un espejo... te persiguen cuando crees estar sin pensar, cada arruga una culpa.
A veces cubro los espejos con paño negro.

Neogeminis Mónica Frau dijo...

El arrepentimiento es la forma primera que tenemos para intentar enmendar un error. Esencial para intentar que se nos perdone. Un abrazo Luferura

El Demiurgo de Hurlingham dijo...

Vio en esa escena toda una acusación.
Saludos.

Roselia Bezerra dijo...

Boa noite de paz, amigo Luferura!
Muito bonita sua participação testemunho de vida.
Gosto de pessoas que falam de si com sinceridade.
O final tem um grande questionamento ao qual vou falar o que penso a respeito.
Se tem no coração de uma pessoa a vontade de perdoar, já está perdoado e não está tarde...
Existe um Perdoador que não é implacável e nos perdoa conforma nosso arrrependimento.
Lindo demais o qeu escreveu!
Tenha dias de dezembro abençoados!
Abraços fraternos

Somos Artesan@s de la Palabra dijo...

Hay hechos, situaciones que a veces te dejan una marca para toda la vida y este parece ser el caso.
Muy buena historia LUFERURA, me gustó.
Un abrazo.
PATRICIA F.

LUFERURA dijo...

Hola Matías,
Muchas gracias por el comentario, tienes razón los sucesos del día pueden amargar la noche. Y los eventos del pasado yacer dormidos para despertar por sorpresa.
Un saludo

LUFERURA dijo...

Hola Campirela,
Es un consuelo para Don Pedro, pero el remordimiento ahí se queda, como un autocastigo.
Un saludo

LUFERURA dijo...

Hola Chica,
Posiblemente fue perdonado, pero el remordimiento carcome. Olvidarse es la mejor defensa.
Un saludo.

Olá, Chica,
Ele possivelmente foi perdoado, mas o remorso corrói. Esquecer é a melhor defesa.
Tudo de bom.

LUFERURA dijo...

Ley de vida, no es tan habitual que los mayores se queden con remordimientos.
Un saludo

LUFERURA dijo...

Hola Dafne,
Muchas gracias por el comentario y creo que tienes razón, un "malo" puede ser muy afilado. Los niños piesan diferente y no son conscientes de lo afilado de esa malo... a veces tradan cincuenta ños en darse cuenta.
Un saludo

LUFERURA dijo...

Hola Buscador,
Muchas gracias por el comentario, que creo completamente cierto.
Un saludo y una Feliz Navidad.

LUFERURA dijo...

Nola Nuria,´
Muchas gracias por el comentario. Creo que tienes razón hay hechos que permanecen larvados en nuestro interior y cuando surgen y nos damos cuenta de nuestras meteduras de pata resulta tarde para enmendarlo.
Un saludo

LUFERURA dijo...

Hola Gustab.
En ocasiones el paño negro negro se cae y verte en el espejo es inevitable.
Un saludo

LUFERURA dijo...

Hola Mónica,
Tienes toda la razón, el arrepentimiento es el primer paso, el segundo paso no siempre es posible, no depende de nosotros.
Un saludo

LUFERURA dijo...

Hola Demiurgo,
Efectivamente, hizo una traslación.
Un saludo

LUFERURA dijo...

Hola Roselia,
Muchas gracias por tu comentario y reflexión. Menos mal que existe ese Perdonador que nos puede dar consuelo. Me alegra que te haya gustado.
Un saludo.

Olá Roselia,
Muito obrigado pelo seu comentário e reflexão. Graças a Deus existe esse Perdoador que pode nos confortar. Fico feliz que tenha gostado.
Tudo de bom

LUFERURA dijo...

Hola Patricia,
Creo que tienes razón, pero este hecho no era tanto una marca (visible) que vez cada día como un quiste (invisible) que descubres que lo tienes. Me alegra que te gustase la historia.
Un saludo.