21 octubre 2025

LA SUPERIORIORIDAD MORAL

 La superioridad moral.

 


    Hay una tendencia, no sé si justificada, de atribuir a la izquierda una supuesta superioridad moral. No sé  si se fundamentará en ese convencimiento de que la izquierda sólo se mueve por ideales, en ese  tenaz certidumbre de que sólo la izquierda defiende a los pobres y que no se somete a los ricos. Este majado de ideas, intenciones, convicciones y fanatismos es el fundamento de esa superioridad moral que permite al que la disfruta meter la pata con la mejor intención del mundo. De forma que esa supuesta superioridad moral permite ser injusto en defensa de la justicia, arbitrario en la busca de la equidad e intolerante en nombre  de la tolerancia. Se escandalizarían por quemar un hereje en la hoguera pero quemarían a todo aquel que no lo fuera.

     Esa supuesta superioridad moral predispone a emitir prejuicios y a atribuirlos como ciertos por venir de donde vienen. Así tenemos que la compra de una vivienda de buen postín según quien la realice es para satisfacer una necesidad o para especular. Que según quien haga el toqueteo sea un depredador sexual o esté confundido y que según quien lo sufra sea una víctima o una casquivana. Permite colocarse al que se la atribuye en posición de la verdad y mutarla a conveniencia.

   La superioridad moral favorece la predisposición al engaño al que está convencido de ella,.Satisface fundamentalmente su necesidad de argumentos que demuestren que no está equivocado, no hay sensación más desagradable que la de descubrir que no estás en lo cierto. Y no hay mayor estafa que regalar unas certidumbres que no existen.  

   También hablamos de superioridad moral sin tener una idea clara de la moralidad en la que dicen ser superiores, basada en un batiburrillo de lo que ahora llaman valores y derechos a conceptos que no son son. En ese caso no tenemos la misma moral y, no participando de la misma ética, creo que se pueden quedar con la superioridad de una moral que no comparto y por la que no pienso competir.

     Y al final llego a la conclusión de que esa superioridad moral no es más que justificar una degradación. Que nos lleva a una sociedad uniforme y unificada de iguales que disfrutan de diferentes privilegios en el convencimiento de que lo que se ha impuesto es justicia.  

4 comentarios:

Susana Moreno dijo...

Un análisis muy acertado. Un beso

LUFERURA dijo...

Muchas gracias.
Un saludo.

Trecce dijo...

Hay mucha hipocresía y demasiadas falacias alrededor de esto de la superioridad moral de la izquierda.

Sintra blogue dijo...

gracias