Participo en el reto juevero que convoca nuestra amiga Campirela, en su blog en esta ocasión se trata de hablar de el cuerpo como territorio, lo atiendo con un enfoque que me sonroja, debo admitirlo, porque el resultado puede ser elegante y bonito o soez y repulsivo, pero se nos olvida que lo que se pretende que sea pasional termine en caricatura. De forma que asumo el reto con miedo. Pero ahí va....
Puede consultar todas las participaciones aquí.
El cuento del mapa
Como otras tantas veces que hemos estado separados esta vez no iba a ser diferente. Decidí hacer una vez más la ruta por el recuerdo de su geografía., el primer paso fue despejar todos los obstáculos que me impidiesen hacer el camino señalado, cosa que hicimos ni rápido, ni lento.
Comencé sumergiendo mis dedos en el mar de su cabello a la vez que encontraba mi guía de salida en esos luceros que iluminan mis días y mis noches y nos mantienen unidos en la distancia. Los abandoné para fijarme en los imperceptibles movimientos de las aletas de su nariz y poder acompasar nuestras respiraciones. Besé sus labios y exploramos nuestras bocas cada vez con más deseo. Me recreé en el gran valle de su cuerpo tras recorrer con mis manos su cuello y espalda para llegar a las curvas de sus hombros. Subí las montañas y me entretuve en las atalayas que las coronaban. Nuestra respiración ya era un jadeo y seguí mi ruta para encontrar y visitar brevemente ese hoyuelo redondo, profundo y perfecto que parece el centro de su mapa.. Seguí bajando, mis manos patinaron otra vez por su espalda hacia las curvas de tus costados y tus caderas, y mientras nos preparábamos para que nuestros mapas se fusionaran, en breve nuestras geografías estarían preparadas a ya a punto de hacer la cartografía perfecta. en el momento que me daba cuenta de que ella también había dibujado la geografía de mi cuerpo. ...
Suiiiii... ¡¡¡Boom!!! El zumbido del proyectil cortando el aire y la posterior explosión hicieron que levantarme, ponerme el uniforme, el chaleco, el casco y salir a la carrera hacia el puesto de mando se realizase en un tiempo tan mínimo que a un observador le resultaría casi imposible seguirlo .. El ataque a la base sólo había destruido ensoñaciones, afortunadamente no hubo más daños. ¡Malditos talibanes!
Muchas gracias ante todo por tu participación , me ha gustado mucho el recorrido que nos has hecho a través de ese mapa de ese cuerpo que nos has dibujado.
ResponderEliminarTodo un cuento de sensaciones para imaginar y disfrutar. Un saludo.
Gracias a ti Campi, siempre es un placer participar y si te ha gustado... mejor.
EliminarUn saludo.
Un relato que describe el cuerpo como un extenso territorio para explorar y despertar las sensaciones amorosas... Saludos!
ResponderEliminarMuchas gracias por el comentario Lady_p, el cuerpo y la mente nos llevan a explorar y la exploración a inventarnos historias, ojalá pudiese contarlas mejor...
EliminarUn saludo.
Loso soldados como los marineros siempre estan asi enamorados pero en la precariedad de la soledad y el momento
ResponderEliminarCreo que todos los que se encuentran en un lugar lejano y sin tener cerca a los que quiere.
EliminarUn saludo.
Muy original. Un beso
ResponderEliminarGracias, pero contar estas cosas, como he dicho, me sonroja.
EliminarUn saludo.
Mmmm qué sensual y erótico tu relato, LUFERURA, me ha encantado ese recorrido que has ido haciendo por el gran valle de su cuerpo, hermosas metáforas. Me encantó ese patinar por la espalda. Lo peor de todo fue el final jjajaja jolines era todo un sueño, pobre soldado el ataque a la base había destruído sus sueños.
ResponderEliminarHa estado genial, con sorpresa final, te felicito, por esta maravilla que has creado, y por cierto, podías hacer más relatos eróticos, veo que se te da genial.
Un saludo.
Hola María, me alegro que ye haya gustado. Prefiero tomar los relatos eroticos con cierta cautela, además de sonrojarme existe la posibilidad de meter la pata en muchos sentidos.
EliminarUn saludo.
Olá, amigo Luferura!
ResponderEliminarUm excelente relato do mapa humano em forma de prosa poética.
O final surpreende o leitor...
Confesso.
Gostei por ser diferenciado dos demais que já li e muito bem escrito também.
Tenha dias abençoados!
Abraços fraternos
Hola Roselia,
EliminarMuchas gracias por tu valoración y crítica, me he pensado mucho si publicarlo o no y tu comentario me anima.
Un saludo.
Olá Roselia,
Muito obrigado pela sua avaliação e crítica. Pensei muito se publicava ou não e seu comentário me encoraja.
Tudo de bom.
Atrapante historia desde el principio. Todo un viaje por la ruta de la geografía de un cuerpo. Me sorprendió el final, que manera de volver a la realidad con un bombazo.
ResponderEliminarQue tengas un buen día!
Saludos
Muchas gracias por el comentario. También te deseo un buen día.
EliminarUn saludoi
Hola LUFERURA, lograste escribir un relato muy sensual, con un erotismo absolutamente cuidado, sin caer en lo grotesco y burdo, con metáforas muy bien logradas con un final que te sorprende, dándote una sacudida de realidad.
ResponderEliminarMe gusta porque lograste un texto de calidad sin caer en nada que resulte desagradable.
Me gustó realmente, saludos.
PATRICIA F.
Muchas gracias Patricia, me alegro que te haya gustado y valoro mucho tu opinión.
EliminarUn saludo.
Jeje no debe ser sencillo soñar bajo las balas! Un abrazo
ResponderEliminarNo es nada sencillo, pero la calma precede a la tempestad.
EliminarUn saludo
Esto de la guerra que quieres que te diga....corta hasta los sueños reales e imaginarios.
ResponderEliminarUn saludo
Pues no te llevaré la contraria, pero si la guerra es la continuación de la política por otros medios... es posible que haya muchísimos sueños cortados antes de la guerra.
EliminarUn saludo
Inoportuno proyectil que interrumpió esa ensoñación, con deseo y apreciación artística.
ResponderEliminarMe gustó como describistte esa exploración anatómica.
Saludos.
Muchas gracias por el comentario y la crítica, me alegro que te haya gustado.
EliminarUn saludo.
Qué arte más grande tienes!!!
ResponderEliminarLos talibanes no sólo han interrumpido tu relato en su punto más álgido, sino que también ha interrumpido la lectura de tus seguidores.
¡Me cachis!
Muchas gracias por tu apreciación. Y como digo al final...¡Malditos talibanes!
ResponderEliminarLa primer parte es hermosa, poética y sensual. Me da mucha pena que sea solo una ensoñación de alguien con un destino tan intenso. Un abrazo
ResponderEliminarHay poco tiempo para el relax. Muchas gracias por el comentario.
EliminarUn saludo.
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarla mejor droga contra la violencia, es aquella de nuestros sueños reales o ficticios. La barbarie nos abre los ojos, pero la esperanza esta muy dentro de nosotros...SIEMPRE ( soy rodolfo, perdona que aparezca como anónimo) un abrazo
ResponderEliminarHola Rodolfo, gracias por el comentario y estoy de acuerdo hacer realidad nuestros sueños (o ilusiones) es lo que la mayoría de las ocasiones nos hace seguir adelante.
EliminarUn saludo
:se único instante marco su vida y la tuya hasta la eternidad.
ResponderEliminarHola Gustab, no entiendo muy bien el comentario, lo de ":se" me descoloca, en cuanto al resto es cierto que un instante puede marcar muchas vidas.
EliminarUn saludo
Las guerras no pueden traer nada bueno *.* Rompen familias, amistades, amores... y sueños.
ResponderEliminarMuy buen relato.
Un besazo juevero, Luferura
Hola dafne,
EliminarNo sólo eso, es que ña mayoría de ellas no arreglan nada, Siempre se habla de todas como la definitiva, Muchas gracias por tu visita.
Un saludo